El Facebook del Bisbat de LleidaEl Twitter del Bisbat de LleidaEl Google Plus del Bisbat de LleidaEl RSS del Bisbat de Lleida

"Pidamos al Señor que nos purifique y nos renueve"

La Catedral de Lleida, que se llenó, acogió el Martes Santo la Misa Crismal presidida por el Obispo Salvador y por el Obispo emérito Juan.

Una nutrida representación del presbiterio diocesano participó en la Misa Crismal donde se consagró el Crisma y se bendijeron los Santos Óleos que se utilizan durante todo el año. También en este acto los sacerdotes renovaron sus promesas.

El Obispo Salvador reconoció en su homilía que "son momentos complicados para nuestra Iglesia". "Sentimos fuertes críticas a todos nosotros y estamos preocupados y tristes", dijo. En este sentido hizo un llamamiento a los sacerdotes a "no sentir desánimo y desesperación". Y pidió al Señor que "nos purifique y nos renueve". Además, dio las gracias a los sacerdotes "por su vida de servicio a la comunidad y por su disponibilidad". A continuación, los instó a "dedicar tiempo a la oración personal, a formarse, a buscar la santidad y ser protagonistas de la pastoral vocacional".

En la misma línea, el Obispo Salvador hizo un llamamiento a las comunidades cristianas a "acompañar a sus sacerdotes como si fueran de la familia". Y añadió que "si nos amáis, decidnos qué podemos hacer para mejorar". El prelado destacó que "todo lo que pasa en la Iglesia, debe servir para purificarnos".

Tras la homilía tuvo lugar la bendición de los Santos Óleos. Se bendijeron el Óleo de los Enfermos (utilizado en la unción de los enfermos), el Aceite de los Catecúmenos (para el Bautismo) y se consagró el Crisma (empleado en el Bautismo, la confirmación y la ordenación presbiterial).

Los aceites han sido obsequio de las parroquias de Sarroca de Lleida, Torrebesses y la cooperativa de Juncosa con motivo del 100 aniversario. Durante la eucaristía también se tuvo un recuerdo para los sacerdotes traspasados el último año.