O bien, en este Año C
Segunda lectura
Ap 22, 12-14.16-17.20
¡Ven, Señor Jesús!
Lectura del libro del Apocalipsis:
Yo, Juan, escuché una voz que me decía: «Mira, yo vengo pronto y traeré mi recompensa conmigo para dar a cada uno según sus obras. Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin, el primero y el último. Bienaventurados los que lavan sus vestiduras para tener acceso al árbol de la vida y entrar por las puertas de la ciudad. Yo, Jesús, he enviado a mi ángel para dar testimonio de esto a las iglesias. Yo soy la raíz y la descendencia de David, la estrella radiante de la mañana».
El Espíritu y la esposa dicen: «¡Ven!». Y quien lo oiga, diga: «¡Ven!». Y quien tenga sed, que venga. Y quien quiera, que tome el agua de la vida gratuitamente. Dice el que da testimonio de estas cosas: «Sí, vengo pronto». Amén. ¡Ven, Señor Jesús!
Evangelio
Jn 17, 20-26
Que sean uno en nosotros
Lectura del santo evangelio según san Juan:
En aquel tiempo, Jesús, levantando los ojos al cielo, oró diciendo: «Padre santo, no sólo por ellos ruego, sino también por los que crean en mí por la palabra de ellos, para que todos sean uno, como tú, Padre, en mí, y yo, en ti, que ellos también sean uno en nosotros, para que el mundo crea que tú me has enviado. Yo les he dado la gloria que tú me diste, para que sean uno, como nosotros somos uno; yo en ellos, y tú en mí, para que sean completamente uno, de modo que el mundo sepa que tú me has enviado y que los has amado a ellos como me has amado a mí.
Padre, este es mi deseo: que los que me has cofiado estén conmigo donde yo estoy y contemplen mi gloria, la que me diste, porque me amabas, antes de la fundación del mundo. Padre justo, si el mundo no te ha conocido, yo te he conocido, y éstos han conocido que tú me enviaste. Les he dado a conocer y les daré a conocer tu nombre, para que el amor que me tenías esté con ellos, y yo en ellos».